La Inversión Fija Bruta (IFB) cerró el 2017 con una caída de 1.5% (variación anual acumulada), su mayor contracción en cuatro años, golpeada por su componente de construcción, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Fuente: El Financiero/ Héctor Usla
Es su primer caída desde el 2013, cuando se colapsó 3.4%; pronostican recuperación, aunque lenta, para este año.
La caída en la IFB para un cierre de año no se presentaba desde el 2013, cuando se colapsó 3.4%; sin embargo, en ese entonces ambos componentes se debilitaron: construcción cayó 5.3% y maquinaria y equipo no creció.
En el 2017 el componente de construcción cayó 3.7%, mayor a la contracción de 0.3% del 2016, afectado por su interior de no residencial, que se contrajo 7.9%, su tercera caída al hilo. Mientras que la construcción residencial creció 1.2%, ello fue una aceleración respecto de 4.2% del 2016.
En tanto, el componente de maquinaria y equipo creció 1.5%, una baja de ritmo por segundo año; en su interior la compra nacional cayó 0.3%, y la importación creció 2.8 por ciento. “En general, los resultados del 2017 no modifican nuestra perspectiva a corto plazo para la inversión: esperamos que siga mostrando cierto rezago en relación con el crecimiento económico general, con un progreso, aunque lento, en los próximos meses, debido a la magra inversión gubernamental en infraestructura y al exceso de capacidad instalada en varias industrias”, señaló un análisis de CitiBanamex.
DICIEMBRE LEVANTÓ
Durante diciembre, la IFB consiguió crecer 0.3% (tasa anual desestacionalizada), consiguiendo salir del terreno negativo en el que estuvo tres meses, impulsado por construcción.
“Con el avance mensual, la inversión recuperó la caída que tuvo en los tres meses previos, en gran parte por los desastres naturales que afectaron a México en septiembre”, detalló CitiBanamex.
En el transcurso del 2017 la IFB cayó en seis ocasiones, siendo el peor mes abril, con 5%; por el contrario, el mejor mes fue mayo con un alza de 1.0 por ciento. La construcción en diciembre creció 2.6%, luego de 12 meses de contracción, apoyada en su interior de residencial, que se expandió 7.6%, su mejor indicador desde noviembre del 2016, cuando creció 9.8 por ciento. En tanto, construcción no residencial acumuló 21 meses en terreno negativo, con una caída de 2.0 por ciento. El componente de maquinaria y equipo sumó cuatro meses de caída; en diciembre se contrajo 1.4%; la compra nacional cayó 10.3%, la tercera al hilo, y la importación creció 4.9 por ciento.
