Fuente: El Universal/ Sara Cantera
- Dudas tras elección se disipan e índice llega a 56.23 puntos, el mayor desde 2011
Los 56.23 puntos del segundo trimestre del año están 6% arriba respecto al trimestre anterior, 10% por arriba del valor registrado en el segundo trimestre de 2017.
El índice, que fue elaborado por Bimsa Reports, se basa en los resultados de una encuesta trimestral entre 300 empresas constructoras a nivel nacional.
César Ortega, vocero de Bimsa Reports, explicó que este resultado es debido a que después del 1 de julio pasado se terminó la incertidumbre sobre si el resultado generaría una crisis en el país.
“El hecho de que haya ganado con la contundencia con la que lo hizo (el presidente electo Andrés Manuel López Obrador), el hecho de que los perdedores hayan reconocido la misma noche de la elección su derrota y que haya habido comunicación inmediata con el gobierno por terminar.
“Que (López Obrador) se haya mostrado mucho más presidenciable y menos candidato a partir de que ganó. Todo eso acabó por tranquilizar y normalizar las expectativas”, comentó Ortega.
Aumenta volumen de obra. En los componentes de corto plazo del índice destaca el incremento del volumen de obra, mismo que también alcanzó un nivel máximo histórico, al ubicarse en 55.4 puntos, 6.1% por arriba del trimestre anterior y 6.5% con respecto al mismo periodo del año anterior.
El subcomponente que mide el volumen de obra contratada alcanzó los 55.4 puntos, registrando un máximo histórico, debido a una reducción en la brecha entre el volumen de obra efectivamente producida contra la esperada, el cual pasó de 16 a 13 puntos, porque la obra efectivamente producida se incrementó 10% respecto al trimestre anterior.
En general, 50% de las empresas encuestadas consideran que su situación mejorará con el nuevo presidente, 46% consideran que seguirán igual y sólo 4% piensan que estarán peor.
Los constructores están muy optimistas por los proyectos de infraestructura que el próximo gobierno ha anunciado, como el Tren México-Querétaro, el Tren Maya y la descentralización de oficinas
del gobierno federal.
“Todos estos proyectos generan construcción de infraestructura, servicios, rehabilitación de vivienda, edificios y bodedas”, agregó Ortega.
Menores obstáculos. En cuanto a los obstáculos que impiden una mayor ejecución o desarrollo de obra, el porcentaje de empresas que consideran que sí existen factores limitantes se redujo en 22% en comparación con el primer trimestre del año, al pasar de 65% a 53% de las empresas que fueron encuestadas.
Con respecto a la transparencia en los procesos de licitación, ésta se percibió como el mayor obstáculo al desarrollo de obra, con 25% de las menciones, seguida de los problemas de liquidez, con 22%, y la falta de inversión en el sector de la construcción, con 21%.
“Se ve que el próximo presidente tiene ganas de que el gobierno retome el rol que en algún momento tuvo de ser promotor, a través del gasto, del crecimiento de la economía”, apuntó Ortega.
Además, 67% de los constructores consideran que el resultado de la elección beneficiará a las negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte entre México, Estados Unidos y Canadá.