En un hecho inédito, con la modernización del Tratado de Libre Comercio Unión Europea-México (TLCUEM) el gobierno mexicano abrió por completo la participación de empresas del bloque comercial a la contratación pública federal, por lo que podrán entrar a licitaciones gubernamentales tanto del actual como del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM).
Fuente: Milenio Diario/ Luis Moreno
La modernización del acuerdo comercial permite a las compañías de países de la Unión Europea entrada directa a licitaciones, tanto del actual como del Nuevo Aeropuerto Internacional de México.
En el país las compras públicas representaron 5.2 por ciento del producto interno bruto y alrededor de 21.1 por ciento del gasto del gobierno.
“México abrirá más oportunidades de contratación pública a las empresas de la Unión Europea que a cualquiera de sus otros socios comerciales, pues podrán ofertar para brindar productos y servicios a entidades públicas mexicanas que nunca se han abierto antes de su adquisición”.
Por ejemplo, pueden concursar para brindar bienes y servicios al aeropuerto que está en operación, señala el Acuerdo en Principio, firmado el 23 de abril entre ambas partes y que se distribuyó en la Comisión Europea.
En el documento, del que MILENIO tienen copia, señala que como parte del capítulo 11, “Contratación pública”, México también abrió la participación de algunos compradores de adquisiciones públicas muy importantes, entre ellos el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del
Estado (ISSSTE), la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y Petróleos Mexicanos (Pemex).
La Unión Europea ofreció reciprocidad de acceso de proveedores nacionales a su mercado de adquisiciones, incluidos los servicios públicos.
Con la firma del acuerdo comercial, México también se compromete a entablar negociaciones con las entidades federativas para ofrecer el acceso de los licitadores de la Unión Europea a las contrataciones.
“México también se ha comprometido a lograr una cobertura mínima de las entidades públicas para los estados que ofrecen acceso a los licitantes de la Unión Europea.
“Esto es importante porque esta es la primera vez que México abre la contratación pública a escala estatal en un acuerdo comercial”, subraya el texto.
En reciprocidad, México también tiene acceso no discriminatorio a las empresas de la Unión Europea, mediante contratos de asociación, que es un cambio para ingresar a las concesiones de obras en ese bloque. El acuerdo también garantiza que la contratación pública se presente bajo normas no discriminatorias y con total transparencia.
“México ha aceptado garantizar un alto nivel de previsibilidad y transparencia de sus procesos de contratación pública mediante la introducción de disciplinas de nueva generación, equivalentes a lo convenido internacionalmente en el Acuerdo sobre Contratación Pública de la Organización Mundial del Comercio”, indica.
Señala que se deben incluir altos estándares para los remedios comerciales disponibles para las compañías que hacen ofertas y consideren que han sido tratadas injustamente; además de contar con una plataforma única donde se den a conocer todas las licitaciones.
“México también acordó hacer que el proceso de licitación sea más transparente, al publicar todas las licitaciones públicas en un único sitio web de compras. Esto hará que la información sobre oportunidades en el mercado mexicano dé más fácil acceso a las empresas europeas, incluidas las pyme”, explica.
Un nuevo elemento en el acuerdo comercial entre México y la Unión Europea es también la posibilidad de tener en cuenta las consideraciones a lo largo del procedimiento de contratación, siempre
que no sean discriminatorias y estén vinculadas al tema del contrato.