Washington recomienda a sus ciudadanos que extremen precauciones al viajar a Baja California Sur y Quintana Roo, donde se encuentran destinos como Los Cabos y Cancún
El repunte de la violencia en México puede cobrarse a una nueva víctima: el turismo. El Gobierno de Donald Trump ha emitido este martes por primera vez una alerta de viaje para los ciudadanos estadounidenses que viajan al país vecino. La Casa Blanca ha exhortado a sus connacionales a que extremen precauciones de seguridad si visitan los Estados de Baja California, Baja California Sur, Chiapas, Colima, Guerrero, Quintana Roo y Veracruz. Están incluidos dentro del aviso destinos turísticos de primera importancia para México y que han sido azotados por la violencia y el crimen organizado en los últimos meses, como Cancún y Los Cabos.
“Ciudadanos estadounidenses han sido víctimas de crímenes violentos como homicidios, secuestros, robo de coches y asaltos en varios Estados de México”, reza el comunicado publicado por la Embajada de Estados Unidos. La Casa Blanca pide aplazar cualquier “viaje no esencial” a estos destinos ante la posibilidad de encontrarse con “tiroteos entre grupos criminales rivales o con las autoridades”, aunque admite que el Gobierno mexicano “dedica recursos sustanciales” para proteger a los visitantes de sus principales destinos turísticos y que no existe una premeditación para atacar a estadounidenses por el hecho de serlo.
Washington sugiere que los turistas estadounidenses eviten salir de noche en el Estado fronterizo de Baja California, que incluye a la conocida ciudad de Tijuana, ante el aumento de la tasa de homicidios violentos en la entidad. Se da el mismo consejo para Baja California Sur, que tiene grandes complejos turísticos con una mayoría de clientes extranjeros en San José del Cabo y Cabo San Lucas.
La lista, que sustituye al aviso anterior del pasado 8 de diciembre, sigue. En el sureño Estado de Chiapas, por ejemplo, se recomienda no utilizar el transporte público. Sobre Colima se pide no viajar de noche de una ciudad a otra. Está prohibido para el personal diplomático viajar a Guerrero, uno de los puntos más convulsos de México y también conocido por balnearios y puertos como Acapulco o Ixtapa Zihuatanejo. En el caso de Veracruz, que bordea el golfo de México, se exhorta a que los ciudadanos de Estados Unidos permanezcan en zonas turísticas.
Es la primera vez que Quintana Roo, donde se encuentran Cancún y la Riviera Maya, aparece en la lista de alerta de viajes de Estados Unidos. Cancún, la joya de la corona mexicana y la ciudad más visitada del Caribe, ha sufrido en los últimos meses tiroteos y embates violentos a plena luz del día por disputas entre cárteles. Hasta la primera mitad de este año, la ciudad y el Estado habían logrado mantenerse aislados de la ola de violencia que ha amenazado otros puntos del país en la última década. El primer presagio de que eso estaba cambiando vino en enero pasado con el ataque de la discoteca Blue Parrot en Playa del Carmen.
Los Cabos, otro sitio paradisíaco en la península de Baja California y poco acostumbrado a la inseguridad, también ha sido salpicado por la violencia. A principios de agosto, una balacera dejó un saldo de tres muertos y dejó heridas a otras dos. En los primeros siete meses de 2017, Baja California Sur ocupó el cuarto puesto entre los Estados con más homicidios, con 279 y un aumento del 369% en comparación con el mismo periodo del año anterior.
La Casa Blanca ha insistido que la emisión de alertas de seguridad no refleja el estado de las relaciones diplomáticas con México y que se ciñe solo para proteger a sus ciudadanos que viajen al país vecino.
Por ELÍAS CAMHAJI
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