Fuente: El Economista/ Alejandro de la Rosa

La ingeniería mexicana tuvo un lunes de fiesta en el Palacio de Minería, Ciudad de México. El próximo presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, se reunió con representantes de las principales organizaciones de ingenieros del país y hubo felicitaciones, aplausos, compromisos y propuestas.

  • El empresario Carlos Slim fue invitado de honor, aunque guardó silencio público y apenas sonrió cuando el líder de Morena le reconoció, luego de un largo discurso, su éxito internacional en los negocios.

El empresario Carlos Slim fue invitado de honor, aunque guardó silencio público y apenas sonrió cuando el líder del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) le reconoció, luego de un largo discurso, su éxito internacional en los negocios.

En su calidad de anfitrión, el presidente del Colegio de Ingenieros Civiles de México, Ascensión Medina Nieves, fue contundente ante el micrófono: “Hay que mejorar los cuadros técnicos del gobierno y encargar a verdaderos especialistas, funcionarios públicos de carrera, los puestos clave para el mejor desarrollo de la infraestructura en México, como se hacía antes”.

“Desde finales de los 90, el gobierno federal ha reducido y descuidado sus cuadros, que eran los que apoyaban atinadamente la construcción del país”, mencionó.

Uno de los asistentes al encuentro comentó en voz baja en ese momento: “No hay que ir más lejos, el actual titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza, es abogado y el subsecretario de Infraestructura, Óscar Callejo, a pesar de su experiencia en el sector carretero, estudió Ciencias Políticas y Administración Pública”.

No se trataba de la primera ocasión en que los ingenieros hacían esa sugerencia, lo han hecho desde hace varios años en diversos foros.

En el escenario, López Obrador escuchaba atento las palabras y hacía algunos gestos aprobando. Sabía que para la designación del ingeniero mecánico electricista, Javier Jiménez Espriú, para encabezar la SCT había tomado esa consideración, lo mismo que para quien lo acompañaría en esa dependencia el próximo sexenio, como se anunció este lunes en la mañanera reunión.

Muestra de la incorporación de especialistas es que el ingeniero civil Cedric Escalante será subsecretario de Infraestructura; el ingeniero mecánico electricista Carlos Morales fue nombrado subsecretario de Transportes, y el ingeniero civil Alejandro Alvarez Reyes Retana tendrá a su cargo la Agencia Reguladora del Transporte Ferroviario.

Entre los más de 150 asistentes se encontraba el presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción, Eduardo Ramírez, quien ha trabajado junto con el colegio en una agenda común que implica, entre otros temas, impulsar que la inversión pública en infraestructura sea de 5% del PIB y no de 2.5%, que es actualmente, crear una órgano autónomo que gestione y administre las obras, la integración de un banco de proyecto y la necesidad de apostar por el mantenimiento de carreteras, puertos o aeropuertos.

“Fue un encuentro bien organizado y quedó de manifiesto que los organismos especializados y el sector queremos ayudar a sacar adelante a nuestro país”, comentó.

Y como en toda fiesta, el invitado principal (AMLO) tuvo los reflectores y los aprovechó para pedir la asesoría gratuita de los ingenieros en su proceso de análisis de la viabilidad técnica sobre la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de México, tema que, según señaló, le hace sudar demasiado.

Antes de salir, les pidió que levantaran la mano aquellos que se solidarizaban con él en dicho tema. Las manos se alzaron. Hubo risas. El momento quedó registrado en fotografías y video.